Francisco Reynés, presidente ejecutivo de Naturgy, explicó su visión sobre el futuro del valor de la empresa en una entrevista realizada por el diario Expansión. Además, se mostró más tranquilo, con la puesta en marcha del nuevo plan estratégico, nueva estructura accionarial, nuevo esquema directivo y de negocio, nueva política de dividendos y un nuevo código visual para internacionalizar la compañía.

“¿Nos hemos vuelto más aburridos? Bueno, también eso es bueno. En el mercado financiero anglosajón se dice que lo aburrido es bello, boring is beautiful”, comentó Francisco Reynes, asumiendo que la empresa ha iniciado una nueva ruta centrándose en el plan estratégico para el período 2018-2022, que fue el resultado de tres meses de intenso trabajo interno y de diálogo con los accionistas, poniendo el punto de mira en los inversores.

Ahora lo que toca es “ir cumpliendo escrupulosamente con el plan estratégico que presentamos el 28 de junio del año pasado en Londres”, comentó a Expansión, después de recibir el Premio Salmón, que dan los lectores del diario al mejor valor por su trayectoria en Bolsa durante el año 2018.

Siguiendo con el plan, Naturgy se ha posicionado en Bolsa, con una revalorización del 23% el pasado año y un 13% en lo que va de 2019. “La cuestión no es qué vamos a hacer para seguir creando valor, sino qué vamos a hacer para crear valor para el accionista mientras cumplimos con el plan estratégico”, indicó Francisco Reynés, que confesó que está obsesionado con la rentabilidad de la acción, incluyendo la retribución vía dividendos, en dinero constante y sonante.

Reynés, reconoció que la mayoría de analistas sitúan el precio objetivo de Naturgy en estos momentos por debajo de la cotización. “No nos mueve la obsesión de la cotización, sino la obsesión por cumplir con el trabajo que nos hemos marcado”, señaló Reynés.

El presidente ejecutivo de la compañía energética, Francisco Reynés insisitió: “ El precio objetivo es el que te da el mercado y estamos convencidos de que, a medida que pase el tiempo, los analistas terminarán subiéndolo”. El presidente del grupo insiste en que el plan estratégico es “a cinco años” y que ésa es la referencia temporal que hay que tener en cuenta.

Según Reynés, uno de los momentos clave para la compañía, será a finales de este mes, cuando Naturgy presente los resultados del primer trimestre de este año. “Las de 2019 son las primeras cuentas con el plan estratégico en marcha”, comentó Reynés. Serán las que marquen de verdad el rumbo del grupo, ya sin la distorsión que supuso el gigantesco saneamiento que se hizo en 2018 de más de 4.000 millones de euros, para actualizar el valor de algunos activos.

En la compañía, son conscientes de que el mercado lo ha entendido y lo ha respaldado. Aunque para ello se haya tenido que hacer una concienzuda labor de explicación a los inversores, otro de los logros del grupo.

“Ha habido un enorme trabajo en los mercados de capitales”. De junio a hoy “hemos hecho cuatro grandes campañas de road shows y henos tenido más de 600 reuniones específicas con distintos inversores institucionales en todo tipo de plazas financieras, desde Londres, Nueva York, París o Sídney”, afirmó el presidente, quien está convencido de que “hay que ir a explicar la compañía a otros países”. “Además tienes que tener la capacidad de escuchar al accionista, aunque haya empresas que se olvidan de esto”.

Reynés, remarcó que en estos momentos, Naturgy mantiene 80.000 accionistas minoritarios y cientos de fondos de inversión.  La cotización de Naturgy está en alza, ya que cotiza en una zona de máximos históricos tras revalorizarse un 12.94€ en 2019 y anotarse un 23% en 2018. Su capitalización bursátil ha pasado de los 22.275 millones con lo que terminó el último año a superar los 25.157 millones.

Asimismo,la empresa presidida por Francisco Reynés ocupa el séptimo lugar en el ránking por valor en el Ibex 35. A su favor, cuenta ahora con una atractiva rentabilidad por dividendo, que supera el 5% para los próximos años. La remuneración del accionista es la gran baza que exhibe su presidente, pero a los analistas les cuesta ver cómo va a seguir creando valor por encima de los niveles actuales.

Francisco Reynés, espera que Naturgy mantenga unos buenos resultados y cree que aún hay potencial de subida de la mano de recorte de costes, el crecimiento orgánico y su foco en la remuneración al inversor. Este año, seguirá poniendo de relieve la atractiva política de remuneración al accionista. A cargo del ejercicio 2019 se prevee la distribución de dividendos por un importe total de €1.365/acción, un 5% más que los dividendos a cargo del 2018. Asimismo, la compañía continuará adquiriendo acciones propias hasta €400m al año (en ausencia de proyectos de M&A que cumplan con sus criterios de inversión).